Se ha ido uno de los grandes. Tony Curtis, fallecido a la edad de 85 años en su residencia de las Vegas el 29 de Septiembre, me encantó en pelis como Los Vikingos, Con faldas y a lo loco, El Estrangulador de Boston, Chantaje en Broadway y Espartaco. Un grande al que quizá no se le ha rendido un homenaje tan sentido como a Newman, por ejemplo. Leyendo esta noticia del La Times he descubierto que fue enterrado con sus posesiones más valiosas: un sombrero Stetson, una bufanda de Armani, unos guantes para conducir y atención, un IPhone. A su funeral acudieron más de 400 personas, entre ellas el gobernador de California Schwarzennegger quien elogió no el talento o la calidad humana del difunto, sino la valentía que demostró al posar desnudo para Vanity Fair a los ochenta.
Esta es la foto:
Seis esposas, seis hijos, un montón de estupendas interpretaciones y un físico arrebatador. Se ha marchado un grande.
Mira que es bonita la foto en blanco y negro, pero se me ha quedado en la retina la de viejuno con los yorkshire tapándole las partes nobles. ¡Mis ojos! ¡¡¡¡Mis ojoooos!!!