El otro día, por fin vi algo de política de alto nivel en el Senado. Sí señor. Por fin, un senador tomaba la palabra para incidir en un problema urgente que solucionar y que nos afecta a todos: el de el dinero que el gobierno «regala» a los cineastas, una casta de subvencionados. ¡A sus amigos! ¡A los titiriteros! ¡A los de la ceja de ZP! ¡Sí, a esos!
El senador Popular (del PP, no que todos le jaleen en las fiestas de los pueblos) de nombre Juan Van-Halen (no, pese al nombre, no tiene un grupo heavy, tiene un grupo Pop…ular ¡Bwa ha ha!) puso por fin los puntos sobre las íes y dejó claro al titular de Cultura en el Senado, César Antonio Molina, que el cine español «Es un cine subvencionado. Cada vez hay más españoles que no cobran subsidio de desempleo y el cine recibe un dinero generoso de las arcas públicas».
Sí señor. Y como, si no hay cifras, las cosas no parecen importantes, Van-Halen (no, no es un entrenador holandés de fútbol, él da gritos desde la banda en otros partidos), apuntó que si bien la cinematografía nacional recaudó en taquilla 81,6 millones de euros, en 2007 esta cifra alcanzó los 86,73 millones, cuando el Fondo de la Cinematografía destinó en 2008 al cine español 88 millones de euros. Vamos, que hay un desfase ahí de 1 millon y algo entre ayudas dadas y recaudación obtenida. ¡Un despiporre!
Y para no acabar así, en un frío comentar de números, dejó clara su postura con una post-data. No se vayan a creer que es simplemente esto una nota para que se mejore la difusión del cine español y así amortizar la inversión. O no se vayan a creer que lo que intentaba es avisar para que se de un impulso a la cultura y que llegue más y mejor a los españoles, ya que hacemos una inversión. No. ?l lo que quería decir es que: «Con un cine subvencionado sólo conseguiremos una secuencia de pancarta, pero no que el cine español vaya donde tenga que ir. Reflexione, proponga un debate y pregúntese por estas subvenciones, si es lo adecuado. Deje dar café para todos»
Café para todos. Secuencia de pancarta. Que dos grandes reflexiones… Al decir «de pancarta», sin querer se me ha ido la cabeza a la manifestación «a favor de la vida» y contra la ley del aborto. Esa que apoyan en el PP (pese a que ya existía el aborto legalizado en su mandato) a través de la Iglesia. La Iglesia. Que no es pancartera, ni subvencionada por el estado… sin entrar en sus ingresos de taquilla, claro.
De pronto, se me ha ido la cabeza a ese panfletillo del Lince junto al bebé. Ya no entro en que, oye, el bebé es mono pero el Lince es monísimo (y eso que el de la foto era euroasiático y no ibérico, que ya fue la primera cagada de los curillas). Entro en que, para que me impactara el mensaje (que supongo que es, sus excelencias eclesiásticas, el que «el estado ayuda poco a los niños» y no «el Lince nos importa un carajo») quizá habría funcionado mejor el pasquín con una foto de un bebé y al lado, la de un Obispo. Y el lema: «El Gobierno cuida más a los Obispos que a la infancia». Sobre todo, es que sería más honesto, sincero y real: los presupuestos generales del Estado para el 2006 destinaron para retribución de Obispos, Clero, Conferencia Episcopal, etc., en concepto de asignación a la Iglesia Católica 144,9 millones de euros, sin contar desgravaciones fiscales y demás.. Por cierto, 6 millones de euros más que el año anterior, cuando aún gobernaba el PP.
Pero es que al oír «café para todos», he pensado: Vaya expresión más castiza, oiga. Y me he ido con la cabeza a los Toros. Sí, los Toros con mayúsculas. Ya no hablamos de religión y Fe, si no de un supuesto «arte» (yo es que no lo acabo de ver, seguramente, seré tonto, como dice el Defensor del Pueblo). Y ahí, según un estudio de la Fundación Altarriba (y que el imprescindible y descacharrante blog de Chico Santamano citó en su día) el Gobierno da de ayudas a la Fiesta Nacional 564 millones de euros (sin contar ayudas a ganaderos). 500 kilos de euros en una plaza frente los 88 al cine sí que dan miedo y no los kilos de un morlaco. Por cierto, ya que en algunas procesiones de Semana Santa (que celebran la muerte… y resurrección de su Señor) planean llevar un lazo blanco por el «sí a la vida», ¿se animará algún torero, con lo creyentes que són, por llevar el lazo blanco de «sí a la vida»…?.
Pero es que cuando junto las palabras cine+subvencionados+café para todos+pancartero en el Senado, ese lugar que presidió tan molonamente Esperanza Aguirre, mi cabeza se va a otro sitio: Se va a «Sangre de Mayo».
Esa película de José Luís Garci, «Sangre de Mayo», subvencionada a dedo por la Comunidad de Madrid (es amiguito íntimo de Espe, claro) con 15 millones de euros y que ha recaudado la impresionante cifra de 738.707 euros en toda su carrera comercial. 14 millones y medio de los contribuyentes de Madrid, perdidos en una película del señorito Garci contra 1 millon y cuarto perdidos en toda la subvención al cine español del Gobierno central, en un año.
– José, ¿qué tal la pesca?
– Bieeeeen, bien… Uno así de grande he pilao, de 15 kilos.
– A mi vas a contar.
Y eso por no hablar de otras «subvenciones» a cine extranjero que hacen gobiernos como el de Valencia, amigo Juan. Que hacen falta soluciones al problema de la taquilla en el cine español: está claro. Que hay que moverse y buscar ideas: está claro. Pero «pancarteros», «café para todos» y «subvencionados»… Qué huevos tienes, Van-Halen. Qué huevos tienes.
Y no es lo más grande que tienes… pero casi.