LOS ENAMORAMIENTOS, DE JAVIER MARÍAS

La cola de lectores que deseaban que Marías les dedicase sus libros en la feria del libro el pasado domingo era de unos veinte metros de longitud.

Anoche terminé de leer su última novela y yo, que nunca había leído ficción escrita por él, entiendo por qué.

No puedo hacer una crítica de entendida, porque no lo soy, pero sí puedo explicar por qué me ha gustado. «Los enamoramientos» es una novela absorbente y misteriosa que habla mucho más de la muerte que del amor y sin embargo no es triste, pero si irradia una melancolía con la que es muy sencillo identificarse. Es esa clase de novelas (que a mí me encantan) que expresan pensamientos parecidos a los nuestros (o a los míos, no lo puedo saber) de una forma elegante y certera. Esa para mí es una de las comuniones más perfectas entre escritor y lector: la que regala un lenguaje concreto a nuestras intuiciones, a nuestra forma de entender la vida, y lleva nuestros pensamientos más lejos gracias a los suyos. Me gusta sobre todo porque es una novela psicológica ; no podría gustarme por su trama porque, si bien la que hay es muy sugerente, si fuera una serie o una película sería claramente insuficiente.

Pero Marías tiene la capacidad de contar una historia desde el punto de vista de una mujer enamorada y a través de sus ojos desplegar una red de pensamientos, reflexiones y deseos en torno a la situación, a lo que debe pensar el hombre que ama, lo que debía pensar el hombre con cuya muerte se inicia la novela, lo que piensa la mujer que es amada por el hombre al que ella ama.

Me ha encantado entrar en la intimidad de María Dolz y créermela.

Me hubiera gustado leer más sobre el estado de enamoramiento y menos sobre la muerte, pero la relación entre ambos temas es casi de intimidad y en torno a los dos construye una novela que no es perfecta pero sí muy seductora, que se lee con compulsión y que flota dentro de la mente de uno aunque no la tenga en las manos.