De La Habana a Cercedilla

Hay una tiradita, de la Habana a Cercedilla, digo.

Pero volvimos abrigados por la sed, los recuerdos, los malos pensamientos.

Nada más volver de La Habana me fui a un banco para que me concedieran un préstamo al 1%, el mismo al que el BCE les da a ellos la pasta.

¿Sabes qué me dijeron y a dónde me mandaron?

Exacto.

Estuve en La Habana unos días que me parecieron un solo e inolvidable día. Qué bien lo pasamos. Fuimos Eduardo Vilas y yo,  estuvimos trabajando bastante, nos reunimos con muchas personas, pero hubo tiempo de sobra para divertirse: estuvimos en la fiesta de Navidad de la empresa de Eduardo Vilas padre y luego, al día siguiente, comimos todos en la oficina, arroz con frijoles y vodka para beber.

¿No es éste el rostro de la felicidad?

¿O serán más bien estas dos caras sonrientes que tenemos Eduardo y yo?

A la vuelta, vuelta al trabajo (sin excesos, por supuesto).

Aquí estamos en una expedición que hicimos los amigos de Cercedilla para ir a la presentación del libro de nuestro amigo y vecino Ricardo Gómez, El sueño de Lu Szhu, ilustrado por Tesa González.

Muy recomendable.

Antes (y después) de la presentación nos confortamos con bebedizos, porque la cultura a palo seco a mí como que no me prueba, qué quieres que te diga:

Aquí estamos, en la plaza de Tirso de Molina (los paletos de pueblo somos así, tenemos una propensión incurable a ir al centro): Eduardo, Pedro, Esther, Ana y Enrique.

Una cosa que te quería decir:

Mi amigo Andrés Gómez de Enterría forma parte del colectivo NO MAMES. Ya, no sé si el nombre es en inglés o en español.

Desde el mismo 15-M llevan filmando por todo el mundo un documental del que yo he visto un poco y es apasionante. Entrevistan a mucha gente, incluido Noam Chomsky, y da información, pero sobre todo es un llamamiento a la insurrección.

En este enlace puedes ver algo sobre el colectivo y lo que hacen.

En fin, que necesitan algo de pasta para terminar de producir el documental. Y la necesitan antes del 15 de enero o habrá sido trabajo perdido.

Si quieres, aunque sea con un euro, puedes ayudar.

En este enlace te lo explican mucho mejor que yo.

Pues eso. A lo mejor podemos llegar a ver algo que no sea lo de siempre, que diga algo diferente y, sobre todo, que lo diga desde otro sitio, con tu ayuda y la mía.

Ah, casi se me olvidaba: ¡Feliz Navidad!