A los niños los carga el del moño

Leo en Vertele:

«El último reality show de Channel 4, «Boys and girls alone», ya ha levantado polémica. El programa, cuya traducción sería «Boys and girls alone», sigue las vicisitudes de la convivencia durante dos semanas de veinte chicos y chicas entre los 8 y los 11 años, en una finca rural de Cornualles.»

Así yo también hablo idiomas, no te fastidia.

El reality muestra un mundo sin adultos gobernado por niños, oportunamente segregados por sexos, donde cada decisión es tomada por niños de 10 años, lo cual ya ha provocado las quejas de los servicios sociales británicos y de una multitud enfurecida de espectadores. Aquí podéis consultar información y los vídeos del programa.

A mi esto me recuerda mucho a la estupenda peli de Narciso Aka Chicho Ibáñez Serrador, «¿Quién puede matar a un niño?», una fábula de teror protagonizada por unos niños terroríficos que vivían solos en una isla, tras, al parecer, haberse cargado a todos los adultos.

Matarle no sé, pero podría plantearse un remake con el sugerente título «¿Quién puede mandar a su hijo a una finca rural a que exponga su intimidad ante las cámaras y todo un país y se pelee como un triste huérfano dickensiano por un mendrugo de pan con otros diez niños asilvestrados?» Quizá no cabría en el cartel.

Eso sí, aunque la idea me repugna en varios niveles, seguro que el asunto es entretenidísimo porque algunos niños suelen ser muy crueles y el conflicto y el mal rollo son la esencia de un «buen» reality. Y creo que ahora mismo hay unos padres que podrían estar deseando enviar al crío al campamento. Sí, estoy hablando de Miguel, el niño de los insultos de Super Nanny. ?ste es el estremecedor vídeo:

Yo no sé si los padres del reality inglés cobran por vender la intimidad de sus críos y exponerles a un trauma que puede durarles toda la vida (y del que habrá constancia gráfica para siempre) o si los padres de Miguel creen que lo mejor que pueden hacer por su pequeño bastardete es presentárselo al mundo. Si fuera una comedia de los Farrelly me estaría riendo 24 horas seguidas, pero viendo que es real, siento una tremenda tristeza, y creo que debería recibir ayuda de otro tipo. Pero bueno, qué se yo, lo más parecido a la maternidad que hay en mi vida es instalar periódicamente las actualizaciones de Firefox.

A mi cuando era pequeña y me portaba mal me amenazaban con mandarme a un internado, y mas terrorífico aún, mandarme con Mamá Sarita, nombre que conjuraba la siniestra imagen de Sara Montiel fumando un puro mientras me ponía los leotardos.

Este mundo está envilecido.