?ltimamente estoy leyendo muchos libros sobre la Segunda Guerra Mundial. Por necesidad de documentarme y porque me parece apasionante. Y sobre todo porque hay historiadores como Jesús Hernández, que publican unos libros que hacen que la historia no sea sólo una maraña de fechas, lugares y batallas, sino algo adictivo, divertidísimo (dentro del contexto terrible que supone una guerra de cualquier tipo, claro) y vivo. Aquí podéis encontrar su blog, que acabo de descubrir. Yo recomiendo sus libros «Las cien mejores anécdotas de la II Guerra Mundial» y «Hechos insólitos de la II Guerra Mundial», aunque tiene varios más, y sospecho que los acabaré leyendo todos.
Una de las historias que más me ha cautivado del segundo libro que os menciono es el capítulo «El irresistible encanto de Lili Marleen». Como recoge Hernández, «La canción fue compuesta por el pianista y compositor Norbert Schultze. En 1938, llegó a manos de este músico un poema escrito por un soldado germando de la I Guerra Mundial, Hans Leip, y titulado «La Canción del Centinela», y con ella compuso Lili Marleen.
Esta canción fue ofrecida a una cantante de cabaret, llamada Lale Andersen, y fue emitida por la radio alemana, obteniendo un discreto éxito. Sin embargo, esa canción llegó a Radio Belgrado, en poder de los nazis, emisora que transmitía para los soldados alemanes en África del Norte.
Fue radiada con asiduidad sin despertar grandes pasiones. Sin embargo, desde Berlín, Goebbels dijo que era «demasiado sentimental» y que no encajaba con el talante guerrero germánico, ni ayudaba a enardecer a los soldados. Cuando la prohibición de emitirla acabó con Lili Marleen, llegaron muchísimas cartas pidiendo que volviera a las ondas, y la pieza volvió a Radio Belgrado. La convirtieron en la sintonía que utilizaban para cerrar la emisión, y Lili Marleen sonaba todos los días a las diez menos cinco. Los soldados se reunían para escuchar la canción. Goebbels fue informado de la situación y se grabó una versión con ritmo militar para fortalecer el ánimo de los alemanes. Esta vez, Lale Andersen y Lili Marleen lograron un éxito masivo.
Mientras, los soldados ingleses en el frente de África del Norte también sintonizaban Radio Belgrado y no tardaron en rendirse a los encantos de Lili Marleen, hecho que también disgustaba a los generales británicos, que repudiaban que sus soldados fueran cantando una canción alemana; por tanto, también tuvo su versión en inglés. «Cuando las tropas de Rommel conquistaron la ciudad fortificada de Tobruk, los ingleses que en ella resistían se dejaron la radio encendida.(…) Por los altavoces se podía oír a todo volumen la popular canción en su versión en inglés, ante la sorpresa de los Afrika Korps, que no esperaban semejante recibimiento musical», explica Hernández.
El tema fue versioneado por muchísimos artistas en varios idiomas, la historia tuvo su reflejo cinematográfico y Lale Andersen fue a Eurovisión. Lo insólito es que quizá sin la prohibición de Goebbels quizá la canción no hubiera sido tan popular. Obviamente, no hay forma de saberlo pero sí de escuchar la versión inglesa de Marlene Dietrich de Lili Marleen, que supo encontrar lo que ingleses y alemanes tenían en común: el deseo de regresar a casa.
Otros enlaces en Internet sobre el tema:
wikipedia
La página oficial (con versiones en varios idiomas)
Qué bonito.
Se agradece además que hayas obviado la versión de marta sánchez.
¿EEeeinnn?
http://www.youtube.com/watch?v=yc3bZWVUZAk
deleitate
Ella tiene buena voz, pero los arreglos, la ropa, las caras, los coros (Lilí, Lilí) son bastante penosos.
Qué gran documento, amiga!